anArca



La palabra anarquía  deriva del prefijo griego αν (an) =  "no"
  y la raíz del verbo αρχω (arkho) = "jefe"




 La Anarquía no es caos, es una sensible, eficaz, natural y accesible forma de organización que la practicamos todos los seres vivos: de igual a igual, basada en la comunicación y la cooperación mutua. Es una forma de sociedad en la cual las personas conviven sin que ninguno pueda oprimir y explotar a los otros. Se nutre de la libertad, de la creatividad y la construcción. Enseña la autogestión, hacer sin depender, y aspira a que las herramientas, conocimientos y alimentos del mundo estén a disposición de todos y todas. 
Las sociedades anárquicas existimos, cultivamos, trabajamos, nos reproducimos, nos relacionamos sin autoridad ni jerarquías. No tomamos decisiones por encima de los demás, ni siquiera necesitamos llamarnos anarquistas, porque las palabras son de la mente, y relacionarse así es incuantificable, para cada uno es diferente, inmedible; es un deseo de cambio, una transformación cotidiana que se expande, un instinto que nace en el cuerpo y vive en la acción
  

















 Durruti - Alfredo Vallota
El Asalto Oculto a las Instituciones - Bob Black
El cuento de la antropología marxista - Pierre Clastres
El placer armado - Alfredo M. Bonnano
Estado, Guerra y Anarquía - Enrico Voccia
 Hacia un nuevo anarquismo - Andrej Grubacic
Mayo 68: A cuarenta años de aquel mayo - Daniel Barret
Moviendo Contra-y-más-allá o Revolución Intersticial (+ 4 textos más) - John Holloway
Necesidades de Utopías - Alfredo Vallota
La abolición del trabajo - Bob Black
La Arquitectonalidad del Psicogeografiquismo o Los Jeroglíficos de la Deriva - Hakim Bey
La ciudad anárquica - Colin Ward
La realidad material del anti-poder - John Holloway
Las prisiones - Pedro Kropotkin
La pulverización del marxismo-leninismo - Cornelius Castoriadis
Los sediciosos despertares de la anarquía - Daniel Barret
Ser No-violento - Alfredo Vallota
Sobre Herbert Read - Nelson Méndez
Socialismo libertario - Alfredo Vallota
Socialismo libertario: Una propuesta para el Siglo XXI - Mendez y Vallota
Utopía colectiva y autonomía individual: La perspectiva anarquista de la autogestión - Mendez y Vallota
Utopistas - Alfredo Vallota
Vuelve el anarquismo - Domingo A. Rangel
 Zuecos o Plataformas. Sobre la Plataforma Organizacional de los Comunistas Libertarios- Bob Black








¿Qué es la Propiedad?
  • El derecho romano definía la propiedad como el derecho de usar y abusar las cosas en cuanto lo autorice la razón del propietario. Osea que éste es dueño de dejar podrir los frutos de "su" árbol, de sembrar sal en su campo, de matar "sus" vacas cuando y como quiera, de convertir una viña en un desierto y de transformar una huerta en parque.
  • Según la Declaración de los derechos del hombre, publicada en la Constitución de 1793, la propiedad es "el derecho que tiene todo hombre de disfrutar y disponer a su voluntad de sus bienes, de sus rentas, del fruto de su trabajo y de su industria".
  • El Código de Napoleón, en su art. 544 consigna que "la propiedad es el derecho de disfrutar y disponer de las cosas de la manera más absoluta, en tanto no se haga de ellas un uso prohibido por las leyes y los reglamentos".
Las dos definiciones reproducen la del derecho romano: todas reconocen al propietario un derecho absoluto sobre las cosas; y en cuanto a la restricción determinada por el Código, al decir "en tanto que no se haga de ellas un uso prohibido por las leyes y los reglamentos", tiene como objetivo, no limitar la propiedad, sino impedir que el dominio de un propietario sea el dominio de los demás (público o comunal): es una confirmación del principio, no una limitación.

El humano no es dueño de sí mismo; tiene potencias, virtudes, capacidades que le han sido dadas por la Naturaleza para vivir, aprender, amar; pero no tiene sobre ellas un dominio absoluto, no es mas que un usufructuario; y no puede gozar de este usufructo sino conformándose a las prescripciones de la Naturaleza... ¿cómo pretender apropiarse de los que está fuera de él? ¡Que utilice las cosas de la Naturaleza, ya que vive con la condición de utilizarlas: pero debe renunciar a sus pretensiones de propietario, recordando que este sustantivo sólo le es atribuido por metáfora!


La multiplicación del género humano hizo necesaria la agricultura; la necesidad de asegurar al cultivador los frutos de su trabajo exigió la propiedad permanente y leyes para protegerla. Así, a la propiedad debemos la creación del Estado civil.
Sin el lazo de propiedad no habría sido posible someter a los humanos al uso de la ley, y sin la propiedad permanente la tierra seguiría siendo un inmenso bosque. El Estado civil primero fué despotismo, luego monarquía, después aristocracia, hoy democracia y siempre tiranía.
En efecto, la ley, ha creado un derecho por encima de sus atribuciones; ha dado forma a una abstracción, a una metáfora, a una ficción; y todo esto sin dignarse a prever las consecuencias, sin ocuparse de sus inconvenientes, sin investigar si obraba bien o mal; ha amparado monstruosas pretensiones. Ley ciega, ley del humano ignorante, ley rehabilitada, rejuvenecida, restauradora, reforzada, como la salvaguardia de las sociedades es la que ha cegado la conciencia de los pueblos, oscurecido la razón de los sabios y originado todas las catástrofes de las naciones.
La autoridad del género humano afirmando el derecho de propiedad es nula, porque este derecho, cuyo origen fué la igualdad, está en contradicción con su principio.
La ocupación no sólo conduce a la igualdad, sino que impide la propiedad. Porque, si todo humano tiene derecho de ocupación, obtiene un espacio del cual trabajar y alimentarse, y si, por otra parte, el número de ocupantes varía continuamente por los nacimientos y defunciones, la ocupación está siempre subordinada a la población, y finalmente, que no pudiendo, en derecho, ser fija la posesión, es imposible que llegue de hecho a convertirse en propiedad.
EL DERECHO DE OCUPACIÓN ES IGUAL PARA TODOS
Todo ocupantes es, necesariamente, poseedor o usufructuario, calidad que excluye la de propietario. El derecho del usufructuario supone: ser responsable de la cosa que le fué confiada; debe usar de ella conforme a la utilidad general, atendiendo a su conservación y a su desarrollo; transformar el terreno en la medida que siempre predomine la Naturaleza; no repartir el usufructo de manera que otro la explote mientras él recoge el producto, el usufructuario está bajo la inspección de la sociedad y sometido a la condición de trabajo, a la igualdad.
En este concepto queda destruida la definición romana de la propiedad: derecho de usar y abusar.


e s p a c i o   e s   l i b e r a c i ó n

El campo que cultivo puedo poseerlo: a título de primer ocupante, a título de trabajador, en virtud del contrato social que me lo asignó como partícipe (consentimiento comunal). La tierra puede ser habitada en equilibrio al dárle más vida, interviniendo sin interferir, construyendo espacios con elementos de la Naturaleza, organizándose entre los habitantes sin dependencias y de manera horizontal.


Las tierras laborales debieran ser incluidas entre las riquezas naturales porque no son creación humana, y ya que la Naturaleza las cede "gratuitamente" no deberían convertirse en una riqueza social, cuyo uso ha de pagarse (prohibirse).
El creador de la Tierra no la vende, la regala, y, al donarla no hace expresión nominal de los favorecidos. ¿Cómo es que pasa que, entre todos sus hijos, unos son considerados legítimos y otros usurpadores?
La apropiación del más sólido de los elementos (la TIERRA) no ha podido realizarse sin la de los otros tres (el AGUA, el AIRE, el FUEGO), puesto que según el derecho francés, romano y el actual régimen Capitalista, la propiedad del suelo implica la de lo que está encima y debajo de él.
El trabajo no tiene por sí ninguna facultad de apropiación sobre las cosas de la Naturaleza.

Existen en este mundo grandes extensiones de tierras que no han sido convertidas en propiedades individuales. Estas tierras formadas en gran parte por bosques, pertenecen a la masa de la población y a los demás seres vivientes, aún así, el gobierno se las apropia sin oposición y las vende sin importar desnaturalizarlas.


Adaptación del Libro:
“¿Qué es la Propiedad? o una investigación acerca del principio del derecho y del gobierno”




É X O D O   U R B A N O  . . .  o t r o   c a m i n o   h a c i a   l a   r e v o l u c i ó n !

Cada familia al ser partícipe del derecho de ocupar un terreno, cultivarlo, cuidarlo, construir su hogar con los materiales de la zona; es libre, y empieza a elegir la dependencia hacia la comodidad del dinero que quiere.
Cada individuo puede interactuar como quiera con el sistema capitalista, siempre y cuando siga el camino evolutivo de su independencia: realizando trueques (intercambio de necesidades), aprendiendo y enseñando oficios, abriendo talleres comunales, compartiendo la sabiduría, las semillas y las herramientas. Viviendo y dejando vivir. Esto es un proyecto paralelo al sistema, que no lo opone directamente, sino que lo evade, lo supera y lo transforma desde la vida cotidiana: por eso es altamente realizable, positivo y constructivo.
A partir del ejemplo real la gente se suma a la revolución, para que la acción sea comunal, primero debe ser personal. El cambio empieza de adentro hacia afuera.